17 may 2007

¿Es esto Democracia?

Lo quiera o no, soy una persona de derechas. Liberal pero de derechas, sobre todo por contraste con las opiniones que se vierten en los medios, tan centristas casi todas (ironía).

Siempre me he considerado una persona moderada que admite la crítica y el debate. Lo triste del momento actual es que debido a la polarización de los puntos de vista, no hay términos medios. Esto se ve claramente en las afirmaciones de los partidos, principalmente de izquierdas, que como portadores de la esencia democrática (emanada directamente de Dios, a pesar de ser agnósticos hasta que son enterrados cristianamente por si acaso) afirman sin rubor alguno que los otros (el PP y sus 10 millones de votantes) son la derecha-extrema.

Esta simplificación es muy útil ya que cualquier discusión se hace innecesaria, ¿Quién quiere discutir con un fascista?.

De simplemente ignorar a dichos fachas, se pasa a la descalificación y al insulto. Y de aquí a la agresión hay un paso. Ese paso ya se ha dado, se dio durante las elecciones generales pasadas y se viene haciendo de forma generalizada (incluyendo asesinatos) en el País Vasco durante muchos años sin que nos parezca extraño.

Mi forma de pensar me hace respetar de forma casi sagrada las instituciones que todos nos hemos dado para vivir bajo un Estado de Derecho. Detesto la idea de derrocar mediante la violencia nuestro orden establecido y creo en la decisión de la mayoría como única forma de cambiar las cosas. Por lo tanto, me resulta dramático no poder seguir confiando en dichos poderes. La supeditación del poder Judicial al Ejecutivo es tan obvia en el tema de ETA y sus satélites que de facto hemos dejado de estar en un Estado de Derecho.

Como conclusión, decir que no puedo admitir que en País Vasco la mitad de los ciudadanos vivan amenazados (no nacionalistas), mientras la otra mitad calle o consienta dicho chantaje. Es absurdo pretender que existe normalidad donde nunca la ha habido. Es vergonzoso también que estemos más preocupados por la libertad de los cómplices de los terroristas que del derecho a vivir sin miedo de los no nacionalistas.

Lo mismo se puede aplicar al resto de España en donde se generalizan los ataques a sedes y personas relacionadas con el PP, sin que el resto de fuerzas políticas den un paso al frente.

¿Es esto Democracia? ¿Se realizan estas elecciones en igualdad de condiciones?

Afortunadamente, la mayoría de las personas de bien de este país queremos seguir confiando en las instituciones y esperamos tener políticos que sepan estar a la altura. Se buscan Estadistas...

11 may 2007

5 sueños realizables

Me pasa el memeo (meme, o como se llame esto) Albiac. Paso a enumerarlos:

1. Tener bambinos, criarlos y educarlos para ser hombres de bien (jóvenes o jovenas) hasta el momento en el que terminen sus estudios. Después, carretera y manta para poder disfrutar junto con mi bambina del resto de nuestra vida hasta morir mayores, con muchos nietos y con la cabeza en su sitio, hasta que Dios quiera.

2. Ser Director General de Tráfico y conseguir erradicar de las carreteras españolas a todos los asesinos potenciales que usan su coche como arma.

3. Construirnos una casa ecológica auto-suficiente energéticamente que me reconcilie con la naturaleza. Incluido un coche híbrido.

4. Trabajar unos años en un país anglosajón (U.K., Canadá ó EEUU).

5. Conocer un país nuevo cada año.

6. Por último, algo irrealizable, pero también es un sueño personal: dejar huella no solo en las personas que conozco, también en la historia. Sólo me falta "decidir" en que faceta... y si no lo consigo, por lo menos ser una buena persona.

3 may 2007

BANANA REPUBLIC

Cuando en un estado democrático, el poder judicial se supedita al político, es el fin del estado de derecho. Si la frontera entre los poderes desaparece y los medios de comunicación asisten impasibles ante dichos acontecimientos, nos acercamos al fin. Cuando los que levantan la voz ante estos acontecimientos son menospreciados e insultados, apañados estamos. Y mientras tanto la sociedad aborregada..

Cuando el estado se rinde ante un grupo terrorista y su propia supervivencia se basa en que ETA no vuelva a matar, la apuesta solo puede salir mal. Lo peor es que está disparando con la pólvora del rey; con la de todos nosotros y sin nuestro consentimiento.

Qué dichos grupos puedan volver a las instituciones pudiendo disponer de dinero público y lo que es peor de direcciones de ciudadanos es algo terrible que destroza el trabajo conjunto de las fuerzas democráticas de muchos años.

En esas estamos cuando el esperpento continúa: ZP, cual aprendiz de dictador venezolano, hace y deshace a su antojo. A nadie se le puede escapar que la detención de la Pantoja a media noche supone una cortina de humo ante el inaceptable proceso de legalización de los pro-terroristas. Que el día anterior nuestro presidente se paseara por la comisaría de Málaga abanderando la lucha contra la corrupción me produce una mezcla de incredulidad y zozobra.

Solo tengo una certeza: esto no puede acabar bien...